Las victimas son de extrema vulnerabilidad y sus edades van desde los 8 a los 15 años de edad
Nuevamente la ciudad de Rivera vuelve a estar en el “ojo de la tormenta” por un nuevo caso delictivo de índole sexual.
En esta oportunidad el pasado 19 de noviembre del corriente 2020 fue radicada en el departamento de Trata y Tráfico de Personas (TTP) de la Dirección de Investigaciones de la Jefatura de Policía de Rivera una denuncia que hacía referencia a probables abusos sexuales de un individuo hacía varios niños.
Según información periodística recabada por parte de A Plateia en español el hombre denunciado en la oportunidad se relacionaba con los niños en cuestión en diversas instituciones, haciéndose pasar por ayudante técnico en el área futbolística.
Tras lograr relacionarse con sus víctimas, niños de edades de 8 a 15 años, el individuo de 40 años de edad organizaba pijamadas en su casa, invitando a la misma a niños de extrema vulnerabilidad, brindándoles a los mismos alimentación, internet, celular, Play Station, entre otras comodidades, las cuales por la realidad económica de sus familias, en sus casas esos niños no tenían.
Otra de las informaciones periodísticas recabadas por parte de A Plateia en español dan cuenta que el hombre de 40 años, haciéndose valer también de su “creencia religiosa”, en horas de la madrugada cuándo los menores quedaban dormidos, éste haciendo que oraba, aprovecharía la oportunidad para abusar de los menores en cuestión.
Llevada adelante la investigación y tras ser valorados las posibles víctimas de este individuo, víctimas que en principio rondaría en 10 niños aproximadamente, mediante la respectiva orden judicial, los integrantes de TTP procedieron a su detención, la cual fue realizada en la vía pública y posteriormente fue allanada la finca en la cual el hombre de 40 años reside.
En la jornada de este jueves 3 de diciembre del corriente 2020 el hombre indagado será colocado a disposición de la Fiscalía de 2° Turno de Rivera bajo la égida de la Fiscal actuante, Dra. Alejandra Domínguez y posteriormente la Justicia uruguaya deberá tomar una resolución al respecto.
Una vez más Rivera en la “mira principal” de un hecho de delito sexual, dónde el victimario sería un hombre que a “simple vista” realizaba un trabajo social con niños, pero la realidad indicaría que el mismo se aprovecharía el estado vulnerable de los mismos para lograr sus objetivos sexuales con esos mismos niños a los cuales él le ganó su confianza.
Ampliaremos…