El mismo está ubicado en barrio Misiones y a diario muchas personas allí se alimentan
Desde hace muchos años en el “corazón” de barrio Misiones en la ciudad de Rivera funciona el Comedor 50.
Una zona peculiar, un barrio conformado por ciudadanos trabajadores, pero que en los últimos años ha sido escenario de diversos hechos, inclusive relacionado a casos policiales.
En las últimas horas el equipo de A Plateia en español concurrió al Comedor 50, lugar en el cual en forma diaria se le brinda el almuerzo a ´más de un centenar de vecinos, rondando en muchas ocasiones a los 150 platos servidos en forma diaria.
En el lugar en dialogo con el Director del referido comedor municipal, José Luis Viera, el mismo informó como es el funcionamiento del comedor, informando que en el lugar trabajan un total de 8 funcionarias y un funcionario.
Aproximadamente desde la hora 11:30 todos los días en esa popular zona de Rivera, se observa una larga fila de personas, las cuales pacientemente aguardan para ingresar y así almorzar en un lugar higiénico, con una comida realizada en el momento, balanceada, sustanciosa y variada.
Ante la consulta si las personas que concurren allí son solo uruguayos, Viera nos informaba que no, porque también al Comedor 50 de Rivera concurren personas de nacionalidad, cubana, brasilera entre otros.
En el lugar A Plateia en español dialogo con un grupo de personas de nacionalidad cubana, quienes manifestaron que llegaron a la “Frontera de la paz” con ansias de trabajar y residir en Uruguay, pero que económicamente es muy difícil mantenerse cuándo no cuentan con una actividad laboral que los remunere mensualmente, por lo cual el Comedor 50 para ellos es de gran utilidad porque nada más ni nada menos son atendidos en forma sumamente cordial y alimentados en forma diaria.
Las personas que necesitan utilizar el servicio de almuerzo del mencionado comedor municipal, deben concurrir al mismo portando su cédula de identidad, con la cual los funcionarios le confeccionarán una ficha mediante la que se controla la concurrencia de los mismos.
Un hecho no menos importante fue lo que pudimos observar en nuestra visita al Comedor 50, que en forma voluntaria un par de comensales diariamente luego de almorzar permanecen en el local, para colaborar con los funcionarios del comedor, ayudándolos a recoger todas las sillas utilizadas a la hora del almuerzo, hecho que demuestra el agradecimiento de los mismos por la atención que José Luis Viera y su equipo de trabajo brindan a todos los que allí por diversos motivos concurren en forma diaria en busca de un plato de comida.