El “misterio” del niño brasilero secuestrado en Rivera

En la madrugada del 12 de enero del corriente 2022 en la BR 293 de la ciudad de Santana Do Livramento fue encontrado incendiado un automóvil y en su interior 2 cuerpos calcinados, los cuales había sido asesinados y posteriormente incendiados.
En las primeras horas tras encontrado dicho vehículo, las autoridades pudieron detectar que los cuerpos que estaban en el interior del automóvil, eran el de un hombre y una mujer, pero sin poder ser reconocidos, por el estado en el cual se encontraban.
Los días comenzaron a pasar y paralelamente los violentos homicidios se continuaban registrando del lado uruguayo de la “Frontera de la paz”, lo que hacía suponer a los investigadores que ese doble homicidio del hombre y la mujer, también podría haber ocurrido en la ciudad de Rivera.
Diariamente el cruce de información entre la Dirección de Investigaciones de la Policía de Rivera y las autoridades policiales brasileras, tenían un solo objetivo, tratar de unir cabos para llegar al reconocimiento de los cuerpos y saber cuándo y dónde habían sido ultimados.
En el marco de esa investigación, surge un dato, el cual concentraría toda la atención de los investigadores, el que indicaba que la pareja asesinada, tenía un pequeño hijo que podría estar secuestrado por los homicidas de sus progenitores.
Sobre fines del mes de enero las autoridades policiales logran identificar que las personas asesinadas y posteriormente incendiadas, eran Nataniel Bueno Vasques de 21 años y Vanesa Dias de Moura, confirmando también que tenían un pequeño hijo de 5 años de edad, llamado Henry Dias de Moura, del cual nada se sabía.
El trabajo de inteligencia policial llevó a realizar varios allanamientos en la ciudad de Rivera, inclusive la destrucción de una casa que funcionaba como “boca” de venta de drogas, en la cual asesinaron a la pareja en cuestión y a un hombre también de nacionalidad brasilera de 25 años, el sábado 15 de enero del corriente 2022, homicidios todos en el marco de la lucha en el tráfico de venta de estupefacientes por parte de organizaciones criminales brasileras en la ciudad de Rivera.
Los días pasaban y el niño no aparecía, hasta que en la noche del martes 22 de febrero la Justicia autoriza que la imagen del pequeño Henry, se hiciera pública y tan solo 2 horas después, la mujer de iníciales C.C.R.C., de 28 años de edad, se comunica con una Policía femenina, indicando que el niño estaba viviendo con ella en la ciudad de La Paz en el departamento de Canelones, indicando también que una mujer que había conocido en una fila de visita de reclusos en la cárcel de Cerro Carancho, el 11 de febrero se lo había llevado, dejándolo, manifestando que volvería a buscarlo, lo que nunca ocurrió.
Inmediatamente personal de la Dirección de Investigaciones se traslada al Sur del país en busca del niño y de la mujer de 28 años, la cual es traída en calidad de testigo a Rivera y tras sus declaraciones, contradictorias, pasa a estar detenida.
Finalmente en horas de la tarde de este pasado viernes 25 de febrero del corriente 2022, la Justicia uruguaya formalizó a C.C.R.C., de 28 años, por un delito de sujeción a personas menores de edad y un delito de asistencia a la actividad delictiva, condenándola a cumplir prisión domiciliaria total.
Sobre el cierre de edición de A Plateia en español, otra mujer que también fue detenida entorno a la investigación del secuestro del niño brasilero de 5 años de edad, en este caso C.L.N.T., de 24 años, se encontraba declarando ante la Justicia competente.
Un secuestro rodeado por el “misterio”, en el cual las autoridades policiales continúan trabajando con el objetivo de llegar a los responsables de secuestrar y hacer llegar al menor indocumentado, de nacionalidad brasilera, al otro lado de Uruguay.