Tras los diversos controles realizados se detuvieron un total de 8 automóviles y 2 motos
En este 2020 la “Noche de la Nostalgia” fue totalmente diferente a las vividas desde el año 1978 a la fecha, momento en el cual la misma fue creada en el Norte uruguayo.
En esta ocasión a consecuencia de la emergencia sanitaria por la cual Uruguay atraviesa, la misma se celebró de forma diferente a las ediciones anteriores, dónde las “fiesta virtuales” sin lugar a dudas ganaron su espacio.
Justamente para asegurar que en la ciudad de Rivera se cumplieran las solicitudes realizadas por parte de las autoridades, se llevó a cabo un intenso operativo de fiscalización en diversos puntos de la ciudad, controles que estuvieron a cargo de las diferentes unidades de la Jefatura de Policía de Rivera, Guardia Republicana e Inspección General de la Intendencia Departamental de Rivera.
Como resultado de esos estrictos controles realizados se incautaron un total de 10 vehículos (8 automóviles y 2 motos) y se detectaron 5 espirometrías positivas, dónde en algún caso el espirómetro detectó un alto guarismo de alcohol en sangre del conductor al cual se le realizó el teste correspondiente.
Con relación a los 10 vehículos incautados, 5 automóviles fueron retenidos porque sus conductores dieron positivo al control de espirometría, mientras que los otros 3 automóviles y las 2 motos restantes fueron detenidas porque sus conductores no tenían la habilitación correspondiente para conducir.
Con relación a aglomeración de personas las autoridades no detectaron fiestas clandestinas, manifestando el Inspector General Carlos Migorena que en el caso de algunas reuniones de festejo de cumpleaños en casas particulares, se dialogó con las personas, se les solicitó que no continuaran con dichas reuniones, dónde la aceptación y el entendimiento de lo solicitado por parte de las autoridades fue total, por lo cual no se registró ningún inconveniente en ese sentido, detalle éste sumamente positivo, el cual indica la responsabilidad de los ciudadanos riverenses en el delicado momento sanitario por el cual atraviesa la frontera Rivera – Livramento.